martes, 29 de marzo de 2011

Entrene del 21 al 27-02-11. Pusa el trompetista

Hola,

Esta semana he realizado un entrene completito, completito. En resumen, me he cascado unos ciento y pico de kilómetros.

 El lunes una hora de correr y una de gimnasia. El mártes 25 km más o menos. El miércoles lo mismo que el lunes. El jueves 25 km otra vez. El viernes 11 Km en series y el domingo, ni más ni menos que 51'5 km andando.

De esta semana se me ha hecho más amena gracias al "aparatet" de música que me he comprado. El Jueves le adelanté a un señor mayor en dirección a San Andrés y al volver decidí enchufarme la música. Debido a la solana que pegaba no veía bien la pantalla, a parte de que no me aclaraba. Estuve por lo menos un minuto haciéndome sombra y el hombre que pasaba por allí me dice..."le ocurre algo, señor. Está usted bien". Levanté la cabeza y le dije.."Si home, si. Muchas gracias, es que estoy enchufando la música, que como es nuevo no me aclaro. Y me dice..."Ah, como le he visto pasar corriendo y se ha parado de repente y lleva así un poco de tiempo". ..."No, no se preocupe. Muchas gracias jefe y que pase un buen día". Me dió mucha alegría la reacción de aquel señor. Ole ahí.

El mismo jueves, al ratito de esto me veo a un coche parado en la autovía y veo que se dirige a mí el hombre que había fuera. Me quito la música y resulta que quería que lo empujara unos 20 o 30 metros hacia atrás para dejarse caer por una "ribeta" y llegar a la gasolinera. Che que tío, va y se queda "tirao". "Si, home, si", vamos "p'allá". Lo empujé y ala, a correr. Me fuí más contento que el tío de la tiza.

El viernes, haciendo las series, vi a un gasolinero y al dueño de otro coche que estaban empujando un coche cuesta arriba, que al parecer se había quedado tirado también. Sin pensarmelo dos veces y sobre la marcha me puse a empujar, nada, diez o doce segundos y seguí corriendo. Al ratito, cuando bajaba, pasé por la gasolinera y el chicho me conoció. No se que de decía, pues llevaba la música a toda leche, pero por la cara que ponía era algo bueno. Le levanté la mano, le dije que de nada y "au", a la marcha.

El sábado, fiesta y el domingo "panchá" como Dios manda. En otra entrada os cuento más o menos la caminata del domingo y os enseño unas "afotikos".

Saludos

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